Confort térmico en el hogar: nuevas tecnologías eficientes

Por muy agradable que sea el tiempo en el exterior, no cabe duda de que todos los hogares necesitan sistemas de climatización para el verano y el invierno. Los aires acondicionados y las calderas deben estar presentes en la mayoría de las casas. Estos equipos son vitales, tanto para los inviernos fríos y secos como para los veranos con mucha humedad. Da igual que se resida en las adyacencias de los Pirineos o se tenga un piso con vistas al mar en Mallorca. 

Esto es lo que hay que saber de eficiencia energética, nuevas tecnologías y confort térmico. 

Aires acondicionados baratos: ¿ahorran energía?

Es posible conseguir aires acondicionados baratos que tengan una alta eficiencia energética. Esto se debe, principalmente, a que se han creado nuevas tecnologías masificadas de equipos con innovadores sistemas, cuyo compresor trabaja de manera constante, lo cual no exige más trabajo al motor y consume menos electricidad.

Ya se puede comprar un aparato de aire acondicionado que sea eficiente desde el punto de vista energético sin tener que gastar una fortuna. Los fabricantes de electrodomésticos (sobre todo en la última década) han dado prioridad a la reducción de electricidad al diseñar estos equipos.

Hoy no hay ningún sistema de climatización total o completamente limpio o ecológico, a pesar de los importantes avances e innovaciones realizados.

No obstante, se debe recordar que determinados aparatos de aire acondicionado pueden reducir el consumo hasta en un 70%. Esto se debe a que cuentan con la tecnología inverter.

Las empresas fabricantes también se esfuerzan continuamente por mejorar y los inversores son la respuesta. Los equipos de esta naturaleza tienen un compresor que trabaja uniformemente para mantener constante la temperatura en las habitaciones. 

Además, cada día salen al mercado nuevos aparatos de aires acondicionados que superan a la generación anterior. Algunos, incluso, emplean la energía del sol o el calor generado en la misma casa para funcionar de forma casi totalmente ecológica.

En consecuencia, es factible gastar menos dinero en un equipo que permita tener temperaturas agradables, mientras el calor sofocante del verano arrecia en el exterior.

Estos aparatos cumplen tres funciones:

• Mantienen las estancias frescas.
• Ahorran energía.
• No contaminan el ambiente.

¿Cómo elegir una caldera de gas?

A la hora de elegir y comprar el mejor tipo de calderas de gas para una vivienda, local comercial u oficina hay que tener en cuenta diversos factores que van desde la zona geográfica y su clima hasta el tipo de gas y el tamaño de los espacios que requieren calefacción.

Se debe observar lo siguiente:

• El tipo de gas que se suministra a la vivienda o inmueble. Es decir, si se trata de propano, butano o gas natural. En todo caso, lo recomendable es que sea una caldera de condensación que permita recuperar parte del calor generado dentro de la edificación para su purificación y, posterior, uso.
• La región en la que se encuentra geográficamente la vivienda determinará la temperatura interna en función del clima externo.
• Si se compra para un edificio de muchos pisos, oficinas o una vivienda o piso unifamiliar independiente.
• Los metros cuadrados de la casa, oficina o local comercial que requieren calefacción.
• Cuántos cuartos de baño hay que usan agua caliente y si la cocina también utiliza agua caliente.
• El número de personas que viven en la casa o trabajan en la oficina o negocio y sus prácticas de uso de agua caliente y calefacción.
• Dónde se supone que va a ir o se instalará la caldera.

Para tomar la decisión óptima en cuanto a la caldera de gas que se desea comprar, es esencial tener en consideración todas las variables mencionadas. 

Debido a sus prestaciones y eficiencia, casi todas las calderas que se utilizan hoy en día son de condensación. Muchos gobiernos autonómicos apoyan y financian su instalación.

Este tipo de calderas alcanza un nivel de eficiencia superior al de las calderas tradicionales y superan el 70%, además de que permiten ahorrar hasta un 30% en el gasto de gas. 

Por ello, son las calderas más eficaces del mercado. El ahorro lo consiguen utilizando la energía térmica latente presente en los gases de combustión que se crean durante su uso.