El coche, ¿una herramienta imprescindible?

Cada vez son más los conductores que no ven tan necesario tener un coche en propiedad. El alquiler o los medios de transporte alternativos se imponen en todo el mundo.

No hace mucho tiempo, todo el mundo quería tener su propio coche. De hecho, muchas familias contaban con más de uno, algunos hasta uno para cada miembro. La sensación de libertad e independencia que proporciona un vehículo era una de las razones por las que se quería tener un coche.

Sin embargo, cada vez es más evidente que las costumbres están cambiando. Las nuevas normas de movilidad urbana, la lucha contra el cambio climático e incluso la economía nos llevan a un modelo distinto, donde la propiedad no es prioritaria. ¿Cómo funciona ahora este campo? Algunas maneras son las siguientes:

Alquilar, una opción cada vez más interesante

Una de las opciones más utilizadas es la de alquilar un coche. No es nada nuevo, porque esta fórmula se lleva utilizando desde hace décadas para cosas como hacer una mudanza o irse de vacaciones. De hecho, esta última razón sigue siendo la que se impone todavía para alquilar.

Hay quien tiene cierto temor a alquilar un coche por si no es seguro, o si al entregar el vehículo se encontrará con cláusulas que encarezcan el precio. Para evitar todo esto, empresas de rent a car Málaga ofrecen un servicio transparente, para alquilar sin perder la cabeza. Así se puede salir de vacaciones con tranquilidad.

Además de en época estival, cada vez se alquilan más coches para uso cotidiano. Sobre todo personas que necesitan uno de vez en cuando, pero no quieren que pase casi todo el tiempo aparcado en la puerta.

Uso compartido

Otra fórmula que está ganando terreno es el uso compartido de varias formas. Una de ellas es quedar con alguien que va al mismo sitio que otra persona, o cerca, e ir y venir juntos compartiendo gastos de combustible. Otra es comprar un coche a medias, pagando cada uno la mitad del precio del vehículo, seguro y demás. Y una más es prestarle el coche a alguien si lo necesita un día. 

En cualquier caso, es interesante mantenerse informados de todo por si ocurriera algún incidente. Dependiendo de la titularidad y de quién esté al volante, hay casos que están cubiertos o no, por lo que consultar con abogados de accidentes al respecto es una buena idea. Así se aclaran todas las dudas y se pueden tener cubiertos los imprevistos.

Soluciones de movilidad alternativas

Otra de las opciones, y que es cada vez más usada por la generación millennial, son los vehículos alternativos, como la bicicleta o el patinete eléctrico.

Estos vehículos tienen diversas ventajas como no necesitar aparcamiento o que sea mínimo, además de no contaminar. Por ello se están viendo cada vez más en el centro de las ciudades, donde muchas veces está prohibido circular con un coche particular.

Comprar en China este tipo de vehículos es muy habitual, ya que allí se encuentran los principales fabricantes y es posible encontrar todo tipo de productos a precios muy asequibles, entre ellos patinetes y bicicletas. Según los expertos, cada vez veremos más de estos en nuestras calles, sobre todo quienes no viven demasiado lejos de su trabajo o centro de estudios.

Sea como sea, siempre con seguridad

Independientemente de cuál sea la forma de moverse de un lado a otro, es fundamental prestar atención y seguir las normas de circulación. Es algo que todos sabemos, pero el número de accidentes e imprudencias es muy elevado, por lo que no está de más recordarlo.

También es importante que, en caso de tenerlo en propiedad, el vehículo esté en buenas condiciones de mantenimiento y limpieza. Para lo primero, nada como acudir a un taller experto, y en el segundo caso puedes seguir estos consejos para limpiar el coche.

¿Es imprescindible tener un coche esperando en la puerta? La respuesta depende en buena medida de cuánto se utilice y las distancias que gay que recorrer. A menudo merece la pena viajar en transporte público para ahorrarse los atascos, o ir caminando a los sitios, que además ayuda a tener una buena salud.