Los hornos de barro representan una tradición exquisita
Históricamente, el primer horno utilizado por el hombre para cocinar sus alimentos, estaba confeccionado con barro. Su funcionamiento no tuvo variantes desde aquellos tiempos, pero lo que sí han evolucionado son los materiales para la construcción de los actuales hornos de leña. El barro y los ladrillos refractarios han tenido una evolución por la forma de conservar el calor y por su durabilidad, como también han evolucionado las técnicas para su construcción.
Características que diferencian al horno de barro de Pereruela
Los hornos de barro de Pereruela, son fabricados en forma totalmente artesanal, no hay dos que sean exactamente iguales. Están hechos a mano con barro refractario de Pereruela, reconocido por su gran calidad y sus propiedades cualitativas.
El horno barro de Pereruela tiene como beneficio la rapidez de su calentamiento y como propiedad, la acumulación del calor en su interior. En tan solo media hora alcanzan la temperatura deseada, y pueden permanecer calientes durante mucho tiempo. El horno se mantiene caliente por 24 horas.
Esta es una de las propiedades del barro refractario de Pereruela, que puede acumular calor para cocinar por mucho más tiempo que otros hornos de barro comunes. Una vez finalizada la cocción de la pieza en el horno, por ejemplo un asado al horno de barro, tiene suficiente calor como para poder seguir cocinando otros alimentos durante mucho tiempo más.
Los hornos de barro de Pereruela se fabrican en varios tamaños, con diámetros que van desde los 60 cm hasta los 120 cm. Pero los más recomendados son los de 75, 80, 90 y 100 cm de diámetro. No obstante, si el cliente lo requiere, se pueden confeccionar de otras medidas, más grandes o más pequeñas.
Los hornos de barro tienen puerta de hierro, la cual permanece cerrada en el tiempo de calentamiento y para cocinar los alimentos. Poseen una chimenea que sirve para que el humo generado en el interior pueda salir al exterior. Un juego de palas especiales sirven para remover la leña y las brasas y para recoger del interior del horno las cazuelas donde se cocinan los alimentos.
Detalles de fabricación de los hornos de barro
Estos hornos de barro refractario son fabricados con la base de dos materiales que son los más importantes, el caolín y el barro rojo o vermello, mediante la técnica de urdido, aunque el tipo de granulometría que se utiliza permanece como secreto de los artesanos fabricantes. El horno de leña se realiza en húmedo sobre una lisia de DM, y cada artesano marca la fecha de fabricación y su nombre.
El secado del horno es en forma natural, de manera protegida y vigilada por los alfareros, procediendo al desenlusiado a los tres días aproximadamente, manteniendo el horno ventilado durante unos 30 días más, para su secado natural final. Para el secado de los hornos de barro refractario no se utiliza ningún tipo de secador para acelerar el proceso, esto garantiza mayor duración y que el barro conserve sus propiedades refractarias durante mucho más tiempo. De esta forma se producen menos hornos, pero de una calidad y duración superiores.
Una vez que el secado natural está listo, se introducen los hornos de barro que pasan los estrictos controles de calidad, (los que no lo pasan se desechan), en el horno de cocer. Este proceso dura alrededor de 20 horas, con una curva de temperatura que en su máximo alcanza los 1050°C. A esta máxima temperatura permanecen unas 8 horas en forma continuada, para que la cocción penetre en el grueso de las paredes del horno, sin importar cuáles son sus dimensiones.
Las medidas de los hornos de barro que se pueden ver en los catálogos, son siempre las exteriores, y sus paredes tienen un espesor de 4 cm, por lo que para conocer sus dimensiones interiores se le deben restar 4 cm por pared, es decir que su un horno tiene un diámetro exterior de 100 cm, su medida interior será de 92 cm. Las bocas o entradas del horno tienen siempre una amplitud de entre 40 y 42 cm, suficientes para cualquier tipo de cazuela que se introduzca en él.
El montado del horno en su base se realiza con el mismo material con que se confeccionó el horno, y lo mismo sucede con su revestimiento exterior, siendo éste revestimiento aplicado a mano en forma artesanal.