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Robot vs Cobot: ¿cuál es mejor para su paletizado?

enero 12, 2023

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Robot vs Cobot: ¿cuál es mejor para su paletizado?

Los cobots, conocidos también como “co-robots” o “robótica colaborativa”, son robots que han sido fabricados y diseñados específicamente para trabajar con las personas. La diferencia en estos recae en que los robots de carga son los que, por lo general, han sido diseñados para operar automáticamente de forma independiente.

El objetivo de los cobots es el de apoyar el trabajo de los operadores de maquinaria, un ejemplo claro es el de sujetar o transportar un producto. A diferencia de los procesos efectuados por los robots de carga, la acción humana continúa siendo un elemento fundamental en todos estos procesos. En un principio, los cobots habían sido destinados únicamente a la interacción física directa entre el hombre y las máquinas.

Puntos a evaluar entre los robots y los cobots

Son diversos los puntos a considerar al momento de evaluar la eficiencia de los robots y los cobots, aunque algunos de los que más destacan son los siguientes.

Flexibilidad

Hay todo un listado de diferencias elementales entre los robots de carga y los cobots, siendo una de las principales el software operativo que poseen.

Los robots de carga se describen como un sistema universal, lo que quiere decir que su software está enfocado en automatizar cada uno de los procesos de mecanizado. Por lo general, se llega a pensar que los cobots son mucho más sencillos de operar, no obstante, la operatividad de los cobots conlleva a un contrapunto, pues no presentan la condición de autoaprendizaje.

Esto quiere decir que muchas tareas repetidas que el cobot debe realizar tienen que ser integradas una y otra vez. Es un sistema simple, aunque no tan inteligente ni automatizado.

Mientras tanto, los robots de carga sí que son universales, estando incluso equipados con funcionalidades necesarias, siendo populares por su flexibilidad y lo intuitivo que resulta su software. Estos robots también presentan configuraciones simples de posición basada en cuadrículas o inlay, así como un sistema de pinzas que permite múltiples ajustes de mecanizado.

Continuidad y eficiencia

Los robots de carga son diseñados a partir de elementos de alta calidad y, por ende, son perfectos para las producciones industriales que engloban las 24 horas del día. Estos robots también llegan a presentar una resistencia aún mayor a la suciedad, lo que quiere decir que su operatividad es mayor, incluso en entornos realmente sucios.

Funcionalidad e integridad

Los cobots llegan a describirse en el campo profesional como máquinas independientes. Esto quiere decir que parten como unidades de carga o sus pinzas no vienen de serie. 

Dicho de otra forma, es necesario que se les añaden ciertos elementos adicionales para hacer que los cobots se conviertan en sistemas operativos en su totalidad. Un robot de carga, en caso contrario, son células completamente funcionales. Desde un punto de vista macro es un simple caso de “plug and play”.

Gestión y almacenamiento de los productos

Una de las más claras diferencias es la capacidad de almacenamiento que presentan. Los robots de carga cuentan con un almacenamiento espacioso e inteligente, en cambio, los cobots se limitan a una sola capa o mesa.

Una de las mayores diferencias en cuanto al manejo de los productos es su velocidad. Los robots de carga operan de una forma mucho más rápida, principalmente debido a motivos de seguridad. Los cobots deben trabajar un poco más lento a fin de evitar situaciones que coloquen en riesgo a las personas que trabajan con ellos.

Economía

El precio de adquisición de los cobots resulta mucho más bajo en comparación al de un sistema de carga. Sin embargo, como lo comentamos anteriormente, se necesitan ciertos elementos adicionales para transformar los cobots en sistemas completos, aumentando así su precio hasta llegar a superar, en ocasiones, los sistemas de carga.

En resumidas cuentas, los cobots son especialmente apropiados como modelos básicos de automatización para las empresas que disponen de una experiencia limitada con respecto a la tecnología y los robots. En algunos casos, incluso para aquellas empresas que no disponen de un presupuesto tan extenso.