Cinco religiones concentran el 75% de la población mundial
Se estima que existen entre 4.000 y 5.000 religiones en el planeta, algunas con millones de seguidores, otras con grupos pequeños. Ocho de cada diez personas profesa alguna. La que más adeptos tiene es el cristianismo con 2.450 millones aproximadamente
No hay una cifra exacta de cuántas religiones hay en el mundo, debido a que algunas tienen muy pocos seguidores y otras se activan y se extinguen rápidamente. Lo cierto es que las diversas investigaciones que se han realizado estiman cifras ubicadas en el rango entre 4.000 y 5.000 religiones existentes en el mundo entero.
Según el estadounidense Centro de Investigaciones Pew, son cinco las religiones en el mundo con más seguidores, de hecho, éstas concentran el 75% de la población del planeta, son el Cristianismo con alrededor de 2.450 millones de seguidores, el Islam con 1.450 millones de adeptos, el Hinduismo con 1.050 millones, el Budismo con 1.000 millones y la religión tradicional china con 800.
Otra cifra importante que maneja Pew es que ocho de cada diez personas profesa alguna religión.
Definición de una concepción relativa
Explica el portal https://religionesdelmundo.org, el cual contiene información bastante completa sobre este tema, que definir el término religión no es sencillo como se pudiera creer, toda vez que es una concepción bastante relativa teniendo en cuenta las múltiples visiones que hay sobre el término.
Pero entre todas las ópticas existentes alrededor de la definición, hay puntos coincidentes; uno es que proporcionan seres o entidades divinas que venerar y en las que concentrarse.
La religión viene siendo un sistema de creencias que se le impone a la persona al nacer (lo hereda), o adopta por su propia elección o criterio. Son unas normas que la persona debe seguir durante toda su vida relativamente, contribuirán a que su existencia sea buena, y además le hará tener mayor aceptación en su entorno.
Las principales religiones
La religión de más seguidores en el mundo, el Cristianismo, está basada en la vida de Jesús de Nazaret y tiene su origen en el judaísmo. Las creencias del Cristianismo están basadas en su libro sagrado, la Biblia, que contiene los evangelios, los escritos de los apóstoles y las epístolas.
Es de carácter monoteísta, es decir, que cree y venera a un solo Dios que envió a Jesucristo a la Tierra para conducir a los hombres al Cristianismo y fue el mesías anunciado por los profetas, para profesar la salvación de las almas a través de la resurrección.
La segunda religión con más adeptos es el Islam, también monoteísta, que basa sus creencias en su libro sagrado que es el Corán, y que tiene como premisa principal que “No hay más Dios que Alá”. Sostiene que Mahoma fue el último profeta enviado por Dios a la Tierra.
Los musulmanes, como se les denomina a sus seguidores, creen que Alá es la entidad absoluta, singular, eterna y omnipresente. Para ellos Dios no tiene forma, de tal manera que jamás podrán visualizarlo ni describirlo físicamente.
El Hinduismo es otra de las religiones con mayor presencia en el mundo, predominante en el subcontinente indio. Es de carácter henoteísta porque en un Dios, sin embargo, no está negada a la existencia del resto de los dioses, incluso de la posibilidad de adorarlos. No tiene un fundador señalado.
Los conceptos básicos del Hinduismo son moralidad (dharma), acciones y reacciones consecuentes (karma), salvación (moska), ciclo eterno (samsara) y camino espiritual (yoga).
Con respecto al Budismo, la mayoría de sus seguidores se sitúa en el continente asiático. Pudiera considerarse como una doctrina en la que convergen religión, filosofía y psicología liderada por Buda, que no se considera ni un Dios, ni un profeta. Buda significa “el que ha despertado”, a él acuden para pedir consejo.
La religión tradicional china también está catalogada como una de las más seguidas en el mundo. Sus creencias están orientadas a la adoración de los poderes de la naturaleza y los ancestros, y contempla el exorcismo de las fuerzas nocivas.
Tiene como preceptos el Tian, que representa una realidad trascendental o el principio absoluto de la realidad universal; el Yin Yang, dualidad de las cosas presentes en el universo; Hun y Po, dos tipos de almas distintas, que representan la parte espiritual y etérea del ser humano, entre otras.