Control de plagas e higiene ambiental ¿es lo mismo?
Cada vez más observamos cómo las empresas de control de plagas utilizan el término de higiene ambiental dentro de sus servicios. Sin embargo, el término higiene ambiental parece que tiene que ver más con las condiciones ambientales que nos rodean, que con la eliminación de insectos, ratas o cualquier tipo de plaga.
Por eso, a continuación vamos a explicar cuáles son las funciones de las empresas de control de plagas y si el término higiene ambiental es correcto para denominarlas.
Qué hacen las empresas de control de plagas
Las funciones de las empresas de control de plagas urbanas se basan en la eliminación de cucarachas, chinches, ratas, hormigas, termitas, carcoma, avispas, aves… Con medidas preventivas, tratamientos, biocidas y un equipo de profesionales cualificados, realizan una serie de servicios que se califican como “Tratamientos DDD”. Esas 3Ds significan: desinfección, desinsectación y desratización.
Además de realizar control de plagas de insectos, roedores y aves, algunas empresas realizan tratamientos de desinfección realizando trabajos contra la legionella.
Por su parte, en lo que se refiere a desinsectación, como hemos dicho anteriormente, eliminan mediante fumigaciones u otros tratamientos cucarachas, pulgas, chinches… Todo tipo de insectos que puedan aparecer en hogares o comercios. Siempre con el objetivo de eliminar la plaga, pero cada vez con una conciencia mayor por el respeto del medio ambiente.
Asimismo, también disponen de otro tipo de trabajos como son los tratamientos contra plagas de la madera, que se centran fundamentalmente en eliminar termitas y carcoma. Aunque también son insectos, requieren cierta especialización para ofrecer cierta garantía en este tipo de plagas.
Por último, las labores de desratización se centran, principalmente, en la eliminación o control de poblaciones de ratas, ratones y otros roedores.
Qué es la Higiene Ambiental
Entendemos por higiene ambiental a la ciencia que se dedica a la prevención, control y a la mejora de las condiciones medioambientales que nos rodean y que son necesarias para poder mantener una perfecta salud pública.
Esto hace que se dedique especial atención a cuidar el agua, el aire, el suelo, la flora y la fauna entre otros recursos. Por tanto, debemos cuidar los factores químicos y biológicos externos a la persona, para prevenir enfermedades a partir de este tipo de condiciones.
En este sentido, el control de plagas entra dentro de la denominación de ”higiene ambiental”, ya que las plagas son vector de transmisión numerosas enfermedades. Del mismo modo, la prevención de la temida Legionella Pneumophila, también entra claramente en dicho concepto ya que, como bien es sabido, la legionelosis puede incluso acabar con la vida de las personas de un edificio.
Diferencias entre control de plagas e higiene ambiental
Hasta ahí bien, sin embargo hay algunas plagas que no afectan a la higiene ambiental y numerosos aspectos de la higiene ambiental no son tratados por las empresas de control de plagas.
La higiene ambiental incluye factores químicos, físicos y biológicos externos que pueden afectar al trabajador. Se trata de crear ambientes saludables, y no se limita a las enfermedades biológicas sino que incluye otros factores como el ruido, iluminación, calidad del aire, ventilación, temperatura, vibración, gases, etc.
Existen empresas de higiene ambiental que analizan todos estos factores, y son capaces incluso de conseguir dar respuesta a alergias y otras reacciones en las personas que tenían su origen en unas condiciones ambientales inadecuadas.
Por tanto, en conclusión podemos decir que el control de plagas es parte necesaria en la higiene ambiental. Pero sin duda este último concepto engloba un significado mucho más amplio donde entran numerosos factores que dan cabida a empresas de otros sectores como la iluminación, la insonorización, la ventilación , gestión de residuos, limpieza, etc.
