Decorar una casa nueva es una tarea complicada pero muy gratificante
Cuando se debe realizar una mudanza, ya sea por la adquisición de una vivienda nueva o si es en alquiler, es muy importante contratar una empresa profesional, que cuente con la experiencia que la tarea requiere.
Es fundamental, el cuidado de los artículos decorativos en el embalaje y durante el traslado, algunos son muy frágiles, y de todo el mobiliario, para que la nueva casa pueda ser decorada con buen gusto y estilo.
Después de realizar una mudanza con Guirao una excelente empresa de mudanzas en Murcia, hay que hacer el trabajo de acomodar todo. Lograr acomodar y decorar todo el hogar a gusto es una tarea difícil y meticulosa, pero el resultado es muy gratificante.
Es fundamental tener el hogar adaptado a los gustos personales, y que a la vez sea cómodo y confortable. La vivienda es el lugar donde se puede concretar el espacio soñado a través de la creatividad individual, por lo que requiere de toda la atención posible y el esfuerzo para que en vez de una vivienda se convierta en un cálido hogar.
¿Elegir un decorador o un interiorista?
En muchos casos, es buena idea contratar el asesoramiento de un profesional, que en estas ocasiones, después de una mudanza, puede ofrecer soluciones estéticas que sólo a un experto se le pueden ocurrir. Ese profesional puede ser un decorador de interiores o un interiorista, ya que no cumplen las mismas funciones.
El decorador pondrá énfasis en la medición de los espacios, la entrada de la luz natural, los materiales, colores y texturas, el mobiliario, las terminaciones, y todos los elementos disponibles para llenar los espacios, con el objetivo final de gestionar un ambiente determinado o un estilo en particular.
En cambio, un interiorista es más profundo es sus apreciaciones, modificando y distribuyendo los espacios, estructuralmente, sin considerar tanto la estética. A través de la técnica, aplica soluciones para ampliar o modificar los espacios, mediante la eliminación de alguna pared, modificación de las instalaciones, empleando nuevos materiales, y creando un espacio totalmente nuevo.
Diferencias entre interiorismo y decoración
Interiorismo es sinónimo qué diseño de interiores. Se crea un espacio, modificándolo a gusto y preferencia del usuario. El interiorista está más ligado al arquitecto, con el que participa en el proyecto desde su construcción, en cambio el decorador, interviene en los espacios ya terminados, por lo tanto se puede decir que el interiorismo es un punto medio entre la arquitectura y la decoración.
La mayoría de los interioristas conocen mucho de decoración y los decoradores tienen muchos conocimientos de interiorismo, o sea que ambas profesiones se complementan perfectamente.
La decoración de interiores es una disciplina que abarca muchos estilos, según los gustos de cada propietario. También tiene tendencias de moda, o en la mayoría de los casos, la decoración de una vivienda es el fiel reflejo de la personalidad y la psicología de quien la habita.
Antes de concretar la mudanza, hay que contar con la seguridad de que el proceso de compra o alquiler de la propiedad es el correcto, para evitar problemas futuros. Lo más conveniente es contar con el asesoramiento legal a la hora de hacer una mudanza.
La decoración se puede hacer antes o después de la mudanza. Si es antes favorece que los ambientes están despojados.
Diferentes estilos de decoración
La decoración incluye una gran cantidad de estilos diferentes entre sí. Algunos son tendencias en la actualidad, por ser los más elegidos, como ser el estilo nórdico, el minimalista, el industrial, étnica, japando mediterráneo.
Cada uno de estos estilos tiene su carácter propio. Se puede optar en basar la decoración en solo uno o capturar detalles, características o elementos de varios de ellos.
Nórdico
Proviene de los países escandinavos, donde el duro ambiente frío tiene influencia en la decoración, por el tiempo prolongado que se permanece dentro de la vivienda.
Tiende a ser confortable, aprovechando al máximo la escasa luz solar de que disponen. Los colores neutros y el blanco son predominantes, pues reflejan la luz natural de manera impecable.
Se utilizan textiles cálidos como el lino, la lana o las pieles por suavidad y confort. El mobiliario tiene a la madera, como la protagonista principal, que suele pintarse de blanco o dejarles el color natural claro.
Minimalista
Los estilos nórdico y minimalista son los que tienen mejor tendencia en la actualidad. El minimalista es un estilo que elimina todo lo que no sea esencial. Entre las diferentes texturas que utiliza se encuentran las cerámicas, la madera, la arcilla y los textiles. Los elementos utilizados en éste estilo crean sensación de espacio.
Industrial
Es un diseño masculino, que proviene de la época en que los artistas alquilaban las viejas fábricas abandonadas y las adaptaron como vivienda, con el aprovechamiento de la luz y el espacio abierto, aplicando el concepto del loft.
Este estilo se basa en tener los elementos estructurales de paredes y techos a la vista, el mobiliario vintage o armarios metálicos, conductos y tuberías sin cubrir y las ventanas al desnudo.
Étnico
Combina naturaleza con elementos étnicos. Se utilizan mucho los tonos terracota, la madera y el mimbre como elementos naturales. También son preferidos materiales como el ratán o elementos como cestas y lámparas colgantes. El mobiliario preferido es el realizado con estos materiales y en sus colores naturales.
Japandi
Es una mixtura del estilo japonés con el escandinavo, tomando lo cálido de los ambientes escandinavos, con la paz y la armonía de la japonesa. Como el minimalismo, solo permanece en los ambientes lo esencial, pero con elementos naturales como el ratán, el mimbre, el bambú y las cerámicas.
Mediterráneo
Es un estilo que se relaciona mucho con la naturaleza. Incluye materiales extraídos de la tierra como la piedra, la cal, las gruesas vigas de madera. Prefiere los grandes arcos, las bóvedas y los azulejos.
Los elementos que utiliza fabricados por el hombre también se destacan por la materia prima natural, en productos como las alfombras de yute, mobiliarios de madera, mimbre o ratán, ramas secas decorativas, y grandes vigas rusticas para los techos.
Sin importar el estilo elegido, lo más importante es que el resultado final sea un espacio que atrapa y encanta al propietario.