El ordenador reacondicionado es la mejor opción para tener un equipo de calidad por un precio más bajo
Cada vez son más populares los ordenadores reacondicionados por ser equipos con precios asequibles que se venden prácticamente como nuevos. Las tiendas que los venden ofrecen unas amplias garantías y servicios muy atractivos para el comprador.
Cuando se quiere tener un excelente equipo informático, pero no se cuenta con el presupuesto necesario, una muy buena opción es decantarse por un ordenador reacondicionado, el cual se diferencia mucho de los que se adquieren de segunda mano a través de usuarios particulares, ya que habrá sido sometido a decenas de pruebas realizadas por técnicos experimentados.
Una de las razones por las que los equipos reacondicionados se han vuelto tan populares, es porque a diferencia de los clásicos ordenadores de segunda mano, estos vienen con garantía que puede llegar a 12 meses o, incluso, a 24 meses, según la política de cada tienda. De hecho, en muchos casos llegan a tener el embalaje original.
Es importante conocer que un ordenador reacondicionado, o refurbished, como se le conoce en inglés, es un equipo que ha sido renovado antes de ser puesto a la venta. Son varias las razones por las cuales se deben reacondicionar, una de las más comunes es porque presente un mínimo defecto estético o porque poco después de la venta haya sido devuelto por el cliente ante alguna avería.
Estos equipos pasan por un minucioso proceso de revisión por parte de especialistas, quienes se dedican a repararlos, revisan todas las piezas y sustituyen todo lo que sea necesario. Una vez culminado este proceso el equipo queda en excelentes condiciones para su uso.
Sobran las ventajas
Son muchas las ventajas de comprar ordenadores de escritorio o portatiles reacondicionados. En primer lugar, como ya se ha mencionado, hay que señalar que tienen la mejor relación calidad-precio, lo que se puede ver en todas las gamas, desde los equipos más básicos hasta los de última generación. Son equipos asequibles que pueden llegar a ser de calidad premium.
Estos equipos tienen precios mucho más reducidos que los de catálogo, el ahorro puede llegar al 50%. En la actualidad es posible contar con tiendas online reconocidas, especializadas en la venta de estos equipos, que además de los precios insuperables, ofrecen otros atractivos para los compradores, como envíos gratuitos, financiación, actualización de hardware y mucho más.
Otro importante beneficio de los ordenadores reacondicionados es su gran contribución a la conservación del planeta, ya que esto disminuye considerablemente la circulación de desechos electrónicos, lo que además es un beneficio para la economía de los países.
Por otra parte, esto contribuye a la disminución de las emisiones de carbono y a la huella ecológica que resulta del proceso de fabricación de los equipos electrónicos, lo que ayuda en gran medida a reducir la contaminación ambiental.
El exhaustivo proceso de revisión y evaluación de estos equipos es otra de sus importantes ventajas. Entre las fases que se deben cumplir, están la revisión de rendimiento y estética, verificación del estado de la batería en el caso de los portátiles, sustitución de alguna pieza de hardware que esté deteriorada, disco duro, arreglos en defectos estéticos, actualización del sistema operativo y reinicio con las configuraciones de fábrica, entre otras acciones.
Estas intervenciones no permiten que el equipo sea vendido como nuevo, sin embargo, el rendimiento es igual como si lo fuese, la gran diferencia está en el precio.
Un equipo usado vendido por un usuario particular seguramente se verá muy bien por fuera, pero por dentro puede estar muy deteriorado, lo que será algo verdaderamente incierto. Esto no sucede con los ordenadores reacondicionados, ya que se puede saber con detenimiento su estado al momento de la compra.
Existen clasificaciones de este tipo de equipos. El de tipo A + es un ordenador en un excelente estado, con algún defecto estético, casi imperceptible. El tipo A tiene leves defectos visuales o alguna rayadura mínima. El de tipo B tiene defectos estéticos notorios a simple vista; y los de tipo C son equipos con desgaste, vendidos por un precio muy asequible.