Los relojes de pulsera para caballero: ¿cuándo fueron creados?
Los relojes de pulsera son un símbolo de estilo y estatus para todos los hombres, razón por la que la gran mayoría siempre quiere tener al menos uno de estos accesorios. Esta pieza tiene una larga y curiosa historia, la cual culmina en la creación de diversos modelos atractivos lanzados en el mercado.
Hoy en día, el reloj es mucho más que un accesorio de utilidad, está considerado como toda una pieza de moda para llamar la atención y hacer que su portador pueda contar con looks verdaderamente inigualables. Es, además, un gran símbolo de estatus.
No es de extrañar, entonces, que hayan surgido muchísimas marcas y joyerías que elaboran estos accesorios, poniendo énfasis en el diseño y en los materiales. Al combinar estética y materia prima de calidad se pueden conseguir relojes verdaderamente hermosos y valiosos que, incluso, se pueden comprar como inversión para mantener el dinero bien resguardado.
Existen joyerías en Polanco que ofrecen artículos de lujo como anillos, joyas, plumas, entre otros, pero que además, destacan por su amplia promoción en cuanto a relojería se refiere. Son muchos relojes de diferentes marcas, con diseños muy variados para que cualquiera pueda elegir el que más le llame la atención.
En estas joyerías, ubicadas en esta importante zona de Ciudad de México, el cliente puede probarse los relojes de pulsera antes de adquirirlos, para así experimentar de primera mano la comodidad, los pequeños detalles, y el peso de llevar un reloj hermoso y llamativo. De esta forma, se puede tener por seguro cuál es el reloj perfecto para cada persona.
Cada año los más grandes relojeros del mundo sacan sus nuevos diseños, en lo que va de 2021, se ha visto el predominio de piezas exclusivas con una gran creatividad.
Un artilugio con una larga historia
Diferentes tipos de relojes ya estaban presentes en épocas remotas, las antiguas civilizaciones milenarias utilizaban métodos, como la arena o la luz del sol, para marcar la hora. Estas técnicas sencillas, pero ingeniosas, se consideran como los primeros relojes del mundo.
El primer reloj mecánico fue creado en el año 1290, mientras que el primero de péndulo se inventó en el 1656. El reloj poco a poco fue evolucionando, lanzándose ediciones de bolsillo para llevar en el bolso o la cartera.
Ya en este punto nos podemos remontar al siglo XIX para hablar de los relojes de pulsera, que suelen ser comunes dentro del mundo de la joyería. Los prototipos iniciales surgieron cuando los pilotos tomaban el reloj de bolsillo y se lo amarraban en el brazo con una correa, para así calcular los rumbos.
En base a estos modelos empezaron a fabricarse los primeros relojes de pulsera propiamente dichos. Los japoneses fueron pioneros en este aspecto, elaborando los primeros modelos lanzados al mercado comercialmente, marcando una tendencia imitada en todo el mundo.
Inicialmente, los relojes de pulsera no eran muy populares entre los caballeros, pues eran comparados con la joyería femenina. Sin embargo, surgieron marcas como Rolex México, Chronos Wiss o Mont Blanc, que lanzaron diseños más atractivos, creando así el típico reloj de pulsera para caballero que tan común es actualmente.
Los primeros que surgieron utilizaban el clásico sistema de manecillas, dándole ese toque de elegancia y estatus al reloj, el cual lucía un estilo bastante atractivo. A la par se hicieron populares los relojes de pulsera con batería, que mostraban y aún muestran la hora de forma digital.
Los relojes para caballero más codiciados en la actualidad, están fabricados con metales como la plata y el oro, materiales de alta calidad que aseguran un uso cómodo y un tiempo de vida duradero. Las correas pueden ser de cuero o del mismo material que el reloj, existiendo incluso algunas de plástico (aunque estas no suelen tener una calidad muy alta).
En conclusión, los relojes de pulsera son prendas bastante populares actualmente entre los caballeros. Los diversos diseños que se pueden encontrar en el mercado actualmente, hacen que cualquier hombre pueda encontrar el ideal para él o para obsequiar a un ser querido.