¿Son normales los sueños y pesadillas durante el embarazo?
El embarazo viene acompañado de una serie de cambios internos y externos para la mujer, los cuales producen alteraciones dentro de la vida de la misma. Destacándose aquellos que provocan cambios en el patrón del sueño, generando incluso la presencia de pesadillas.
El proceso de gestación que vive una mujer se encuentra influenciado por el entorno en el cual se desenvuelve. Asimismo, cada una de las etapas que va experimentado durante el embarazo, se transforman en situaciones y cambios dentro de su nueva realidad. Puesto que, durante ese tiempo la mujer debe prepararse a nivel interno y externo para formar vida dentro y fuera de ella.
Uno de los más importantes cambios es aquel que se refiere al trastorno del sueño. Donde las mujeres embarazadas pueden verse afectadas por inconsistencias a la hora de dormir o presentar durante las horas de sueños, pesadilla o imágenes vividas de su realidad. Más allá de una creencia cultural, los profesionales han encontrado las razones de estos sueños a través de bases científicas que afirman que los cambios hormonales, los miedos y las emociones que pueda presentar la futura madre, en alteraciones del sueño.
Resulta necesario en estos casos consultar a los expertos en el tema y así descubrir la raíz del problema para tomar acción. Referencia de esto se puede encontrar a través de plataformas especializadas que encausan el tema según las consultas del usuario. De esta manera, en el tema de las pesadillas, se pueden descubrir las posibles causas según americanpregnancy.org y así poder gestionar las acciones que mejoren esta situación.
Sueños en el embarazo, conoce los más comunes
Se debe entender primero que cada mujer es única y presenta diferente realidad, por lo tanto, los sucesos suelen variar y ser diferir en cada caso. Donde se toma como referencia los eventos que ocurren con frecuencia en su vida, los miedos e inseguridades que pueda presentar.
Asimismo, los estudios indican que, a pesar de lo antes expuesto, si es posible encontrar una constante en los cambios que las mujeres embarazadas tienden a presentar. Partiendo de allí, se puede extraer algunos de los sueños más comunes de una embarazada:
- Sueños reales o vividos
- Pesadillas sobre el momento del parto
- Sueños de ansiedad relacionados con su futuro próximo, factor que alimenta sus inseguridades
- Sueños más intensos, sin necesidad de ser una pesadilla se pueden presentar sueños cargados emocionalmente
- Capacidad de recordar los sueños, esta característica se debe lo intenso que estos suelen ser
Así como estos, que suceden acerca del embarazo o posibles complicaciones, existen otros sueños comunes con recién nacidos, haz click aquí y conoce otros sueños con bebés y niños.
Sueños vividos, uno de los tipos más comunes
Dentro de los tipos de sueños que las mujeres embarazadas suelen experimentar, se encuentran entre los más comunes aquellos conocidos como sueños vívidos, los cuales tienen su nombre debido a la sensación que dejan mientras suceden.
La madre tiende a presentar estas escenas mientras duerme, con tal sentido de realidad que no se dan cuenta que son un sueño. Por esto, se empiezan a generar una serie de reacciones psicoemocionales a partir de ellos, provocando ansiedad, estrés o algún tipo de trauma basado en sus miedos acerca de la maternidad.
Expertos como los de babycenter definen este tipo de sueños como el reflejo de los miedos, emociones y ansiedades de los cambios internos y externos que la madre está experimentado o va a experimentar. Asimismo, en esta plataforma de embarazo y crianza se menciona que estos suelen cambiar según la etapa del embarazo, encontrándose entre los más comunes el sueño con el agua durante los primeros meses y la cara del bebé los últimos. Pero sin importar que tipo de sueño la madre experimente, queda comprobado que este síntoma sucede como algo normal dentro de la etapa de gestación. Lo relevante es, no dejarse afectar por aquellos sueños que sean considerados pesadillas y buscar confianza y apoyo con la pareja, familia e incluso el médico de cabecera.
