Tips sencillos para mejorar la decoración del hogar
Crear un espacio que encarne el estilo de vida y la personalidad de quienes lo habitan es todo un reto y arte del diseño de interiores. Una idea errónea muy extendida es que actualizar la decoración de una casa requiere grandes cambios de muebles, adornos y obras de arte y, por consiguiente, importantes desembolsos económicos. Sin embargo, con técnicas innovadoras y a un precio razonable, un hogar puede alcanzar todo su potencial de elegancia y belleza.
Cada idea, desde cambios de una o dos piezas de mobiliario o experimentar con la iluminación hasta añadir elementos naturales pueden servir de fuente de inspiración y orientación para quienes quieran transformar sus espacios. Estos son algunos tips sencillos para mejorar la decoración del hogar:
Los muebles como protagonistas
En toda habitación los mueves son los protagonistas del diseño. Con base en ellos se puede edificar todo el concepto de la decoración. En los dormitorios la cama ocupa un sitial de honor. Pero, muchas son muy caras. Es allí cuando comprar bases tapizadas para colchones es una buena idea.
Con una fracción del coste de una cama o juego de cuarto es posible tener una habitación agradable, moderna y bella con estas bases modernas. No obstante, en estos casos hay que hacer un cabecero, el cual puede lograrse con una cortina, cojines o hasta viniles decorativos pegados tras la base y el colchón.
En el salón el mueble principal es el sofá. El tamaño y la cantidad de este tipo de pieza depende del tamaño de la habitación. Se puede combinar uno de dos o tres plazas con sillones individuales y hasta un par de pufs.
Si se trata del comedor, por supuesto, la mesa y sillas son el eje central. Hoy en día está muy de moda elegir mesas antiguas que pueden restaurarse lijándolas y con una mano de pintura y sillas variadas que contrasten entre sí.
Las paredes como elemento decorativo
No todos pueden guindar un Picasso en el salón, pero no por esto las paredes deben lucir desnudas y sin gracia. Hay muchos sustitutos a los cuadros y obras de arte. Las pinturas texturizadas y el papel pintado son ejemplo de esto.
También lo son los espejos y las fotografías. Es posible tomar una buena foto de la ciudad o de un paisaje que guste, imprimirlas y enmarcarlas. Otra idea es reunir fotografías familiares y dedicar una pared del salón o del estudio para colocarlas.
Si se desea ser más audaz es posible tapizar paredes enfrentadas de césped artificial o de paneles autoadhesivos texturizados para dar más personalidad. Estos vienen en varios diseños y tamaños.
La iluminación: funcional y estética
El diseño de interiores depende en gran medida del uso adecuado de la iluminación. Esta tiene el poder de cambiar por completo cualquier ambiente. La forma en que le da luz a los ambientes influye en la percepción visual, así como en el estado de ánimo de las personas. La estratificación para usarla es una forma eficaz de sacar partido a cada estancia.
Esto implica mezclar dos fuentes fundamentales de luz: la natural y la artificial. En este sentido hay que tomar en cuenta las ventanas y las cortinas y las bombillas o lámparas estratégicamente ubicadas.
Obviamente, la cantidad de luz se estima en función del uso de la habitación. Para trabajar, leer o cocinar hará falta mucha iluminación y espacios diáfanos. Si los espacios son para descansar una ventana usual y la armonía de una lámpara de techo y una de sobremesa, por ejemplo, será suficiente.
La iluminación de acento puede resaltar componentes importantes del diseño y añadir un toque espectacular. Ejemplos esto son las tiras de LED en los escalones de una escalera, detrás de los muebles o los focos dirigidos a obras de arte o espacios en particular.
