El tarot: la forma real de conocer nuestro futuro

La curiosidad por conocer nuestro porvenir nos ha llevado a realizar múltiples prácticas desde el principio de los tiempos. La lectura de la mano, el tabaco, el café y los caracoles, son muchos de los métodos que se utilizan para conocer qué nos depara el futuro; pero las cartas, con sus símbolos y una buena interpretación, pueden ser más asertivas que cualquiera otra opción esotérica.

Cómo saber lo que nos espera en el amor

El tarot es una práctica adivinatoria del futuro que data del siglo XIV. Consiste en la interpretación de los símbolos y números fijados en un mazo de 78 cartas, las cuales son cuidadosamente manipuladas por una tarotista. 

Esta actividad nos permite consultar sueños, acontecimientos y conocer nuestro porvenir en todos los aspectos de nuestra vida.  

Uno de los motivos más frecuentes para solicitar la lectura del tarot son los desamores, pues, ante la mínima duda con respecto a nuestra relación de pareja, queremos saber si esa es la persona ideal, y si en realidad, estaremos junto a él o ella el resto de nuestras vidas.

La tirada de las cartas en la mesa es un arte, y sólo lo puede hacer una persona que conozca del tarot, debido a que a partir de este detalle y de todas las preguntas que realicemos, dependerá el mensaje que nos envíen las cartas. 

Por eso debemos elegir a videntes autenticas sin gabinete, ya que son las que tienen el don natural de predecir el devenir de las personas, sin mentiras ni trampas.

Las videntes de nacimiento tienen la capacidad de adivinar todo aquello que nos afecta y así tener acceso a los episodios que han dejado marcas negativas en nuestras vidas. Con esta información pueden pronosticar lo que nos ocurrirá en un período determinado de tiempo.

Las tarotistas que nos desvelarán el futuro 

Los charlatanes suelen utilizar cualquier truco para hacerse pasar por tarotistas, atraer nuestra atención y llenar nuestra cabeza de mentiras, sólo para quedarse con nuestro dinero. Pero debemos ser suspicaces y no caer en la tentación, por más dudas que tengamos por aclarar.

En España existen muchos falsos profetas, sin embargo, así mismo también hay que aclarar que existen videntes que aciertan en todas sus predicciones. 

Antonia de Vicente, Candela Infante, Rosario Reyes, Pilar Trillo y María del Carmen Garrido, son clarividentes de nacimiento sin gabinete, y han sido recomendadas especialmente por la precisión de sus augurios. 

Ellas aseguran que sólo quienes nacieron con la habilidad de la predicción, son capaces de tener visiones y pensamientos durante la consulta.

Para determinar si una tarotista es auténtica, bajo ningún motivo debemos explicarle con detalle lo que deseamos saber, ni aportar datos. De igual manera, no es recomendable responder preguntas concretas que nos realicen, pues es ella quien debe responder sobre nuestras dudas. 

Una verdadera vidente acierta desde el primer momento, si falla en repetidas ocasiones, simplemente estaremos ante una farsante. De igual manera, si observamos que en determinado momento se desvía del tema de interés, es necesario descartarla, ya que no sabe que inventar. 

Las otras vías para conocer lo que viene

Cada religión tiene una manera de predecir el futuro. Los santeros utilizan la técnica de los caracoles y el péndulo, para dar respuesta a sus creyentes y orientar sobre el panorama que se les avecina. Las gitanas por su parte, leen la palma de la mano, y a través de sus líneas, pueden determinar el tiempo que será nuestro paso por la vida. 

La lectura de los posos del café, también conocida como cafeomancia, es una forma de adivinanza tan antigua como las cartas. Procede de Oriente Medio, donde en una época, tanto el café como el té eran empleados para conocer el pasado, entender el presente y aclarar el futuro. 

Consiste en la interpretación de figuras que se forman en la superficie de una cuchara, las cuales pueden tener formas fáciles de interpretar o simbólicas. 

Todas éstas son formas en las que muchos afirman poder predecir el futuro, sin embargo, realmente no son tan precisas como las videntes reales que mostramos o en muchas ocasiones todo llega a tratarse de un gran show.